17 de febrero de 2011

MARATON COMO UNA FILOSOFIA DE LA VIDA

Aquí os dejo el artículo publicado en el Periodico Extremadura, el día 15 de febrero de 2011, por Pablo Villalobos, tras proclamarse campeón de España de Maratón en la ciudad de Sevilla, y que ha sido remitido por nuestro amigo Jorge Campos:

Se metía mi amigo José María Ortiz ayer en estas páginas con mi futuro deportivo comentando que le parecía que ya después del 2006 había tocado techo mi carrera deportiva y habíamos visto la mejor versión de Villalobos en competición. En el mismo texto se alegraba de que el cambio de distancia y de superficie, de la pista a la ruta, la maratón, me estuviera sentando tan bien y esta mañana comentábamos la jugada y se preguntaba, me cuestionaba, el porqué del éxito tardío de los atletas de maratón, aunque ya le ajusté yo la cuestión a los maratonianos occidentales porque el etíope que ganó el domingo en Sevilla cuenta con 21 añitos.
La maratón es una prueba diferente. En algunos aspectos es una forma de vida, una actitud que se expresa no sólo el día que compites en tu prueba sino en el día a día de los entrenamientos y resto de competiciones. Por eso quizás el ímpetu y las pasiones desenfrenadas de la juventud no sean los mejores ingredientes para su éxito, aparte de que a un alto nivel, es algo que he oído en muchísimas ocasiones, lo realmente duro de la maratón sea su preparación, más que la propia prueba.
También me apetecía tocar otra tecla respecto al comentario inicial. En esta vida los objetivos y la motivación por conseguirlos nos puede llevar más allá de nuestras expectativas. En 2006 toqué techo en pista, mi objetivo, los Juegos de Pekín en 2008 no cuajaron y yo también vi el final de mi carrera en cuanto a retos importantes. Sin embargo tuve el valor de cambiar de tercio, de distancia y de superficie y la maratón me ha devuelto la motivación para luchar de nuevo por el sueño de unos Juegos. Eso es algo que también sucede en la vida diaria, hay que buscar nuevos objetivos y motivaciones que nos lleven a ese fin y, sobre todo, a ser felices en el camino.

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